Siria sigue cubierta de miedo y en esta oportunidad por el terror que Al Qaida está sembrando en el país al realizar públicamente crucifixiones.
En este sentido, desde que los yihadistas consiguieron el control de la ciudad de Reqqa, en Siria, hace ya más de un año, la lista de incidentes fatales y violaciones a los derechos humanos no encuentra un punto final.
De esta forma, la última terrorífica acción tiene que ver con la crucifixión pública como forma de castigo en una serie de ejecuciones ejemplarizantes.
Hasta el momento, y de acuerdo a la información disponible, al menos tres personas fueron víctimas de este tipo de castigo. El primero de los castigos fue dado a un presunto ladrón ejecutado el pasado 16 de abril. Y pocos días después dos hombres también fueron crucificados al ser acusados de atacar a militantes de ISIL.
El conflicto sigue creciendo y al contrario de ir apaciguando y dejar en paz a los civiles sirios, se encuentra sediento de sangre y actos realmente humillantes y violentos hacia la humanidad.
Vía: ABC
Imagen: Hoy es Noticia