Luego del anuncio de la Unión Europea acerca de la autorización a sus miembros de poder comprar petróleo a los insurgentes sirios, el Gobierno de este país ha mostrado su malestar por esta decisión, que lógicamente beneficia a los insurgentes a partir de que obtendrían grandes ingresos de dinero que utilizarían en la Guerra interna entre ambos bandos.
En este sentido, la prensa siria destaca que Damasco denunció, mediante un comunicado oficial, que esta acción, en caso de llevarse a cabo, podría llegar a ser considerada una violación de las leyes internacionales y de los principios establecidos en la Carta de la Organización de las Naciones Unidas.
En tal sentido, el Ministerio de Relaciones Exteriores sirio también realizó sus propios movimientos, enviando un pedido formal al comunicado al Consejo de Seguridad de la ONU, en el que señala procedentemente que el comprar petróleo sólo a los rebeldes podría ser considerado una violación al “principio de no injerencia en los asuntos internos del país”.
De este modo, una vez más queda lamentablemente claro, que todos los demás países que tienen injerencia y efecto sobre la Guerra de Siria hacen más bien poco para evitar que la matanza de inocentes continúe en estas tierras, y que en verdad sólo les importa el rédito económico que puedan sacar del conflicto.
Vía: Telesur TV
Imagen: Euro News